Baiteadores baiteados
Las Fuerzas del Cielo mantienen de hijos a los intelectuales de la coalición del déficit que prefieren alimentar brujas antes de aceptar que el poder ya es algo que les quedó lejos. Extras.
Hay un interrogante de cajón, que recorre los bares, los whatsapps: si las provocaciones del llamado Gordo Dan son guionadas, planificadas, o si son la expresión natural de los cuadros ascendentes de las fuerzas del cielo y que revelan sin muchas vueltas lo que en realidad son: unos fachos. Aceptar la pregunta implica mejorar la que sería mi hipótesis más básica sobre ellos: que son aventureros o arribistas, como cualquier hijo de la clase media desvencijada que se arrima a la política como atajo económico, y que ligaron el rebote del vértigo de ponerse por encima de sus vecinos, compañeros de colegio, de club, al quedar más cerca de la rosca de lo que habrían podido esperar. Así que discutir la forma es la mejor manera de ocultar el fondo y darles una mano para el camuflaje de las intenciones reales. Pero bueno, cada uno tiene su mercado y a mí me corresponde jugármela con las simulaciones de los actores. Es como ser crítico de teatro.
En realidad, la pregunta argentina sobre el fascismo con la que yo crecí es cuán fascista fue el peronismo de Perón. Razonable por el encadenado de imposiciones antidemocráticas, el luto obligatorio por Eva cuando ingresó nada menos que en la inmortalidad, la inscripción del nombre del General y su señora en todos los establecimientos y territorios nacionales y el uso de todas las herramientas estatales para magnificar sus figuras, los libros de textos escolares, “La razón de mi vida”, que con gran cordialidad histórica se hacen pasar ahora como clima de aquella época. Perón había visto además en primera fila, en Italia, el surgimiento del fascismo y no huyó escandalizado, no dijo juntemos ya cien escritores para parar esto. Muchos años después, el Kirchnerismo repitió el formato con la santificación de Néstor, incluso con el enrejado de la fachada este del Ministerio de Bienestar Social con unos fierros retorcidos que componen la imagen de Eva, apasionada y enferma, renunciando a los honores que se ve casi con claridad desde el Obelisco. Los niños, ojo, creen que está comiendo una hamburguesa, pregunten. Es posible que, a diferencia de Milei, Cristina haya abusado del poder porque era buena, y que haya transformado cada resorte del Estado en su resorte para acelerar la felicidad del pueblo. Es posible, pero no es probable.
Por lo tanto, que Milei funcione como incubador de fascistas cumple una función purificadora sobre el peronismo como nuestro más reconocible fascismo de cercanía y alivia a las últimas generaciones del peronismo divine, los que se hicieron peronistas con Néstor, los peronistas egresados del Liceo Francés, hasta con casa en Punta, y que ven con beneplácito que se descuentan puntos en el scoring negativo del movimiento al que se subieron para darle brillo a sus identidades sociales ambiguas por el enriquecimiento repentino de padres o abuelos y por sus propias profesiones, que agregan poco valor, como artista o pastelero. El peronismo provee botox existencial, el acomodado socialmente con alfileres se coge al negro y ahí se siente entero.
El mileísmo, por supuesto, sigue un manual de marca que tiene lo amenazante como uno de sus vectores: el león, la motosierra, La Renga y la voz raspada que saca El Javo para saludar sus fanáticos. Toda esa parafernalia de los actos, vamos a decir exhibicionista, con los pendones, y enamorada de las simetrías y el brutalismo, la escondimos bajo la idea de que son sujetos vírgenes, célibes involuntarios, que no saben dar ni recibir amor físico, y que eventualmente son la consecuencia estética de la estupidez congénita de quien fue elegido presidente y de su sorella. Ni observando desde la cumbre más alta donde se yergue el ande se admitió que se trata de un diseño, de un cálculo que se abastece de las características del líder para rematar en un cuerpo estético aberrante, deliberadamente perpendicular a todo lo conocido hasta aquí. A mí me incomodó cuando, tras ganar las elecciones, en su discurso de aceptación de los resultados, Milei insistió con el carajo de su viva la libertad. Mi mente infantil, alfonsinista, habría esperado que al ganar por el apoyo de muchos de quienes no lo habían votado en la primera vuelta las malas palabras terminarían. Ja. Como esperé palabras amables de Cristina después de las masacres estatales de Cromañón y Once. Pero ni Cristina ni Milei son como yo quiero.
La intención autoritaria de Cristina se abasteció de algunas modas, nuevos climas de época, los flashmobs, las agrupaciones teatrales físicas, el Periférico de Objetos o Fuerza Bruta. También de la Masa Crítica, los ciclistas que de noche hacen un Ramadán por las calles de la Ciudad. Estas manifestaciones ciudadanas y artísticas son como los atentados de los montoneros, con la cordialidad de no matar a nadie, pero reclamando la atención y la aceptación de que son seres superiores a los que admirar, respetar y rendirse. Te sacuden, burlan tu comodidad y seguridad, te enseñan de esa manera que el mundo es incierto excepto para ellos que tienen el poder. La seguridad de tener razón y de que nos correspondía a todos aceptarlo y pagarlo.
La negación espectacular, en tu cara, de los afanos de la familia Kirchner, fue parte de la agenda cultural. La indecencia quedaba cubierta por la bondad de la propuesta. Así que la rendición de cuentas también. Porque claro, como se aflige Martín Kohan desde sus videos: ¿qué es esto de la nuestra? Y cuando Cristina dijo vamos por todo después de la Tragedia de Once, el oído adicto escuchó que podían seguir cuchareando sin culpa, sin descanso, porque si ella podía pasar por alto semejante cosa, todo podría pasarse por alto.
Traer los años montoneros a la escena, como el tiempo del encuentro nacional con lo absoluto, a matar o morir por la patria, un reino breve de verdad histórica por la fuerza de la juventud y su sacrificio posterior, también fue parte del armado autoritario. Tenía de dónde agarrarse simbólicamente para decir vamos por todo y llenar de pibitos el patio de las palmeras para que la viven. Pero el clima de época se encontró con el clima de época y Cristina hizo todo lo que pudo con su delirio personalista, pero no todo lo que quiso. En Internet podíamos resistirla en pijamas y funcionó.
En 2024 cuando todos somos públicos y libres, también en Internet, o privados y clandestinos, porque es cuestión de elegir tu propia pestaña, donde la plata viaja por billeteras digitales con asiento legal en Buenos Aires o en las Bahamas, ser facho es, sin duda, más difuso y seguramente menos efectivo. Un facho de la vieja escuela debería fracasar, sin duda. Y en ese sentido, la lata de Mango Loco que el Gordo Dan tenía en el atril para refrescarse y darse máquina tiene que darnos la idea de que si la hipótesis de que sea un facho es posible, que se trate de una provocación es aún más probable.
La de facho es una clasificación en la que clasificador y clasificado se imantan para darse una agenda. El facho eventual provoca, y el bueno de corazón, de izquierda o más o menos, reacciona como si le tocaran el culo a la hermana. De ahí la idea del bait de la que se habla mucho y no todos entienden. El baiteo es caer en las provocaciones del rival. La que llamamos aquí en Un Correo de Esteban Schmidt la coalición del déficit no termina de captar el cambio de época, y sigue funcionando como en el siglo veinte y así es que se come todos los amagues de las fuerzas del cielo. Se ve que no quieren volver al poder, quieren tener una razón vieja para que los acompañe al geriátrico.
Compañeros, el pueblo trabajador elige a Milei como mediador de sus deseos. La eliminación de peajes en el estado, el cierre de oficinas improductivas, junto a la baja de la inflación, son enormes anabólicos para la imagen presidencial y los dirigentes opositores no pueden decir ni mu. Dónde está la declaración pidiendo por el INADI o por Télam. No está porque ni siquiera los trabajadores de esos organismos se sintieron mal con el cierre. La solidaridad habría demorado su libertad de acción. Un cambio de vida que te desparasita en tus años adultos, productivos, aún cuando comporte una pérdida de privilegios, se recibe con íntima satisfacción. A lo mejor no se puede contar para no darle ventaja al enemigo, pero ese silencio no lo hace menos real. Vale como mensaje para toda la mediana edad.
El baiteo, quiero dejar una enseñanza, tiene una ley intrínseca que, si no existe, bien puede llevar mi nombre y que dice, o va a decir, lo siguiente: todo baiteo se incrementa hasta el momento en que cansa y se lo ignora. Se hace con el baiteo como con el psicópata. No se le presta más atención. Sé que no parece lógico decir que evitar el fascismo está en nuestras manos, pero sí lo está cambiar la conversación. Una idea: que la coalición del déficit se presente en 2025 como la coalición del superávit para todos y todas. No es normal que habiendo tanta inteligencia del lado de la bondad, del otro te caguen a goles.
Ayer, compañeros, los escritores del régimen de la Feria del Libro y de la Fed hicieron una misa laica en el teatro El Picadero, donde se realizó el venerado Teatro Abierto en el tramo final del último gobierno militar cuando todo ya estaba bastante tranqui. Unos cien escritores, o más, se encontraron a leer en público el libro de la escritora y madre multípara Dolores Reyes, cuya obra más importante, Cometierra, fue motivo de comentarios ásperos de la vicepresidenta y de otras eminencias oficialistas durante la última semana que hicieron capturas de fragmentos de contenido sexual de su libro que movieron para escandalizar y provocar. El libro es parte del programa llamado Identidades Bonaerenses del gobierno de Axel Kicillof. La rama cultural de la coalición del déficit cantó censura, pidió penal, un par de días de cámara de eco y armaron el acto.
No leí el libro de Reyes, no me animé, pero al menos leí todos sus tatuajes, porque hizo de su cuerpo algo así como un baño público, igual que los futbolistas, pero en su caso con mensajes agudos como “basta de matar mujeres”. No encuentro mejor forma de perjudicar la propia obra que entregarse tan fácilmente al espectáculo. Dolores que, además, es secretaria “en la escuela 41” de algún lugar muy lejos en el conurbano, no es competencia automática para las solteras del mundo editorial ni para los varones porque sus temas son de mujeres, así que fue perfecta para hacer un gran caso de denuncia internacional alrededor de la idea de para dónde nos están llevando los libertarios.
El espectáculo del Picadero fue peor de los esperado porque quedó gente afuera, lo cual puede darles la idea loca de la legitimidad alcanzada por la propuesta. Antes de salir al teatro, los cuadros que se presentaron pudieron haber buscado su inteligencia donde la hubieran dejado la última vez y darle cuerda a ver si aparecía algo más. Pero se atuvieron al manifiesto original, a la idea de la censura, y se esforzaron por lookearse y dar la nota por ahí.
Fue otra oportunidad perdida para los jóvenes que se definen como escritores, la pierden todos los años en las Ferias, para desengancharse de los tres o cuatro salvados que viven en casas grandes y les meten fichas, pero que después se quedan con los viajes. Uno normalmente dice escritores y piensa en todos aquellos a quienes ha leído y subrayado, sujetos inteligentes, con capacidad de abstracción, y cuya marginalidad se volvió inevitable por efecto de su inteligencia, porque el pensamiento agudo los saca del rebaño donde se asume la velocidad del más lento como el ritmo intelectual posible. Pero aquí ni por casualidad, suspenden la imaginación teórica para comprender, y la práctica para contestar y ante la menor oportunidad nuestra comunidad de autores se amontona como las familias gitanas frente a los hospitales cuando tienen un familiar enfermo.
El kirchnerismo cultural ya es otro pueblo errante que necesita su oportunidad de montar su carpa y mostrar que está para algo más que para hacer trampa. Y necesita la frecuencia para sostenerse como clan. Así que si la oportunidad es floja pues la exageran. La movida de ayer buscaba evitar que el diablo de la censura se instale en esta comunidad, sobre la que ellos saben más que todos los demás. Curioso, porque los kirchneristas culturales creyeron durante muchos años que podían tocarle el culo a todo el mundo e imponer sus modas en colaboración con sus colectoras en el PRO y el radicalismo que cooperaron en alimentar la clase pública, los conversatorios, todas las pantallas que tuvo el déficit fiscal.
Ya termino.
La colección entera de Identidades Bonaerenses está armada para cubrir a la propia tropa de escritores, tirarles unos mangos a las editoriales, mayoría total de partidarios de la jefa inmortal, ilustradores y editoriales. Está bien, es el plan platita de las letras, pero interpreto que reproducen aquello de los flashmobs. Los curadores saben qué es lo bueno para los pibes de la 383 o de la 41 de Dolores y les toca a ellos bajar la caña y lo van a hacer con toda su arbitrariedad y es más que entendible porque son ellos quienes se comen los zooms para coordinar cosas o quienes tienen que pelear un pago con la tesorería.
Compañeros, cada escritor escribe lo que se le canta y como se le canta, pero la colección sobrerrepresenta la violencia de género, la oscuridad eventual de los vínculos amorosos, que las familias esconden algo, que es lo que aprendieron los curadores de la colección en sus terapias para entender donde están parados. Pintan el conurbano bonaerense como el conurbano de Teherán.
Durante la llamada pandemia el subtexto de muchos especialistas en educación que militaban el cierre de las escuelas para aplanar la curva es que iría a demostrarse que la institucionalización de los pibes no es tan importante, y que los padres de derecha, los que querían que se abrieran las escuelas, se vieran en la necesidad de interactuar más con sus hijos, para que vivan una de esas fábulas de izquierda de Mario Benedetti, tipo “Ustedes y nosotros”, “con sábanas qué bueno, sin sábanas da igual”. Un proteccionismo moral con dunga dunga.
Lo de ayer en El Picadero tuvo algo bonito, más allá de la política, escritores ricos y pobres reunidos en un mismo salón para salvar algo más que sus obras. El Picadero como espacio interclase, con una misma aspiración lujosa pero no menos conmovedora: asegurar la libertad de expresión, que si bien no está en riesgo, con que ellos lo sientan así es suficiente. Además, cualquier encuentro humano es positivo, se recuentan las solidaridades para cuando alguno atraviese una pálida, como hacen los gitanos.
Que el viejo progresismo termine baiteado o bailado es una mala noticia en términos históricos porque en su mochila, aunque sin uso, lleva la idea del ascenso y la integración social, la misión cultural bondadosa de que nadie quede atrás, y que no se salve sólo quien pueda. Este afecto por el prójimo no aparece en el texto estatal presente que, por el contrario, está colmado de despidos y amenazas de despido al transgresor o al vago. En ese sentido, la agenda de la coalición del déficit siempre será una agenda viva, como la masa madre, podrá activarse cuando el pueblo reclame la suya o cuando una elite nueva sepa decirle que puede reclamarla a través de ellos y los vote. Los escritores podrían dar eventualmente una mano escribiendo cien fantasías patrióticas distintas, pero no la misma como hicieron ayer: hay que darle opciones a los líderes.
Los insufribles de la semana.
Clara Muzzio es la vice Jefa de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y si bien es cierto que uno puede decir que simplemente es boluda esta definición puede ser incompleta y es menester argumentar. Un vice jefe de Gobierno es una nada para la narrativa de un ejecutivo municipal a menos que se invente una historia que no desafíe al jefe, que si le suma a éste mejor, y que no se relacione con la gestión cotidiana, así tampoco debe responder sobre la poda caótica y fuera de calendario de los árboles o sobre la basura. Victoria Villarruel, por ejemplo, vende el nacionalismo del que Milei carece. La señora Muzzio encontró su punto en la baja de la tasa de natalidad y en sus efectos secundarios, como que muchos mayores que han tenido hijos se encuentran con el destino de no ser abuelos, pobres no abuelos, o tira de las orejas a las mujeres que se vuelven añosas sin concretar. También advierte sobre la llamativa infrecuencia de nacimientos de niños con síndrome de down por efecto de los estudios prenatales que anticipan la patología y que lleva a las parejas a optar por la discontinuidad del embarazo, el aborto, bah. O sea, se mete donde nadie le pidió que opine, pero, eso sí, dio con la narrativa que le permite crecer un poquito y alimentar una colectora de derecha que alimente a su jefe, o al próximo, con pose de tradwife, apegada a valores esenciales de la familia argentina en una ciudad donde solo se construyen departamentos para solteros.
La pesca del día no puede ser siempre y en todo lugar merluza. Compañeros gastronómicos: escriban merluza, pronúncienlo, soporten como el menú se vuelve ordinario en forma automática, como el pizarrón en la calle revienta el prestigio de su negocio. O, sirvan lenguado, mero. Decía el general Perón, la Argentina es el único país donde los peces se mueren de viejos.
El papelón que es el Parque de la Innovación que armaron para compensar las torres para millonarios que van a erigir en el predio que pertenecía al club Tiro Federal. Colocaron árboles enanos que van a dar sombra recién en medio siglo, volcaron toneladas de cemento para el senderismo de beduinos en verano, casi creando la excusa futura para meter más torres en las que tampoco vivirá nadie.
Nunca no es buena oportunidad para recordar que el Tiro Federal lo mudaron al lado del Parque de los Niños al que concurren mayormente bendiciones de hogares menos favorecidos que escuchan miles y miles de detonaciones todo el tiempo que pasan ahí, confirmándoles que su entorno ambiental tiene que ser siempre una basura. Idea y dirección del desarrollista Horacio Larreta.
Messi peleándose para la tribuna con futbolistas a los que decuplica y centuplica en talento, plata, goles, trayectoria, fama y que podrían tener como mejor anécdota haber jugado contra él alguna vez en una eliminatoria que quedará en el olvido. Lío les arruina el recuerdo y alimenta en los niños que lo miran por tevé la idea de que hay que ponerse al borde las piñas con cualquier rival en cualquier circunstancia y sin considerar la asimetría.
Chacaritología
Dos hermanas nacidas y criadas en Tucumán, de apellido Rojas, pusieron un negocio de empanadas tucumanas llamado Las Rojas. Queda en Dorrego al 1000. Hacen también las tapas y el producto que resulta es impecable. El comercio es un mostrador a la calle, dos o tres mesitas, así que son para picapear o comer de parado, al paso. ¿Caen mal? No.
Cabo suelto 1
Aparecieron las latas de Molisana en Jumbo a 1800 pesos cada una, con la que armás dos pizzas perfectamente. Recomiendo las prepizzas de Craft Vegan Bakery, siete mil pesos por dos unidades. Y hay que sumar 6000 de muzzarella Barraza. O sea que por 7400 pesos te comes una señora pizza de muy buena calidad en casa. Por 15.000 come toda una familia tipo.
Cabo suelto 2
¿Por qué los medios legacy no existen más? Porque no pueden contar que en Jumbo aparecieron las latas de Molisana sin que les arme un quilombo mental acerca de qué tipo de noticia es esa.
Cabo suelto 3
El pobre Longobardi no puede con su alma y siendo la más acabada expresión del arribista se quedó con el resentimiento del caddie y no la suficiencia del golfista. Entiendo que los periodistas millonarios que se quejan de Milei fueron afectados de dos maneras muy específicas por el gobierno: con el retiro absoluto de pauta publicitaria nacional lo cual empuja a la baja el resto de las pautas publicitarias municipales, provinciales y de empresas públicas por ser las únicas disponibles, y por no disponer de puentes con el poder, off the records con el presidente, lo cual en la liga de Longo, Pagni, Fontevecchia, y todo el payroll de Guillermo Seita era lo corriente. Ahora son periodistas con público pero sin plata comiéndose ahorros para sostener la vida de ultrarricos que tenían en los gobiernos anteriores. ¿Los problemas de ellos son universales? No. Mi libertad de expresión no está afectada en lo más mínimo, tampoco la de tantos compañeros cuyos artículos se publican en plataformas como ésta y otras. ¿Cómo podrían los neofascistas cercenar mi libertad si no controlan ni van a controlar lo que se publica en Internet y tampoco los necesito para pagar mis vacaciones?
Aprecien el esfuerzo, compañeros. Aprecien, aprecien. Colaboren con un guiño mensual. No se van a comprometer financieramente y a mi me aportan un ladrillo para sostener las horas que me lleva escribir que son un millón. Además leen, no es que no leen.
Letras de molde para Simón y Amparo. La revista Orsai, emprendimiento del forista Hernán Casciari publicó una compilación de algunos correos sobre mis hijos y sobre la paternidad en general. Con ilustraciones muy buenas del plástico mendocino Fernando Carmona. Casciari también le puso su voz a los textos. La publicación de tamaño libro y gran calidad gráfica se consigue en este lugar .
El otro día hicimos fideos en casa con la Pasta Linda, comprada durante la llamada pandemia. Novecientos pesos de harina y semolín, y seis huevos orgánicos de dos mil pesos total. O sea tres mil los fideos y otra lata de Molisana de 1800 para toda la familia. Almuerzo de cinco mil pesos, people.
Un día se desclasificarán los documentos del Departamento de Estado y sabremos de la Argentina de estos años un montón de cosas. Me lo perderé. Pero hay para entretenerse, la semana pasada la Embajada de Estados Unidos reunió escritores locales. Infobae nos presenta las fotos. Dejo dos.
Ya está en el cielo Omar Moreno Palacios, por si lo quieren contratar. Para mi fue un crack. Y su identidad bonaerense era sin violaciones, sin quilombos.
Vale la pena cada centavo que pago por la suscripción ;) Gracias por no defraudar. Y el mensaje sobre Internet es algo que la gente olvida. No hay que ser un analista de la gran puta para saber lo que es la verdadera censura. Pero como decís vos... mientras lo sientan parece suficiente para que se torne real ja.
“El peronismo provee botox existencial” es una gran línea me hizo reír.
Muy bueno todo pero disiento que la Masa Crítica y el movimiento ciclista hayan tenido que ver específicamente con el Kirchnerismo o con un clima autoritario. Al contrario la Masa Crítica, por lo masiva, reunía a un variopinto de anarquistas (muchos), gente apolítica globalista, macristas y seguro también cristinistas.
Participaba allá por 2010 y era más bien una disputa de la calle y una performance de adhesión al avance de la bici por políticas ambientales de capitales europeas y norteamericanas (Barcelona, NYC, etc.) que otra cosa. Macri lo capitalizó bien tanto a nivel local como internacional, codeándose con Bloomberg en las cumbres de C40. No veo relación con lo K ahí… cuando el ciclismo se volvió mainstream perdieron fuerza porque ya no había tanto que reclamar